El último día del curso.

¡Resulta ser el último día del curso escolar 2018-19!

Un curso escolar, resulta ser un camino, hacia alguna parte… nunca hoyado, pero de los muchos pasos andados, con la apariencia de ya recorrido. Y por parecer recorrido, repetitivo y cansino… con la misma melodía y la misma letra reiterante… pasa por desesperante.

Y ya sabemos, ¿qué pasa cuando las cosas se repiten… sin ilusión? ¡Que cansan! Luego no es que se repitan, sino que carente de ilusión, anegan y ahogan la motivación.

El cansancio se contagia y se incrementa al tiempo … Hoy vivimos en un mundo cansado, no por exhausto, sino por desilusionados… porque no sabemos encontrar la ilusión, el esfuerzo, la motivación … Hoy necesitamos adquirir “coaching”; motivadores externos, que nos implementen ese chute adicional que nos levante el ánimo para superar el tedio y la adversidad que la vida nos plantea …

Acabamos el curso, pero no se acaba nada, porque si nada hemos logrado, nada consolidado… sólo el tiempo transcurrido, entonces, alcanza ya su término.

Pero no es de empezar de nuevo, sino de revitalizar y levantar la voluntad para alcanzar lo inalcanzable, no ya de nuevo, sino por primera vez y cual primer peldaño consolidado, empezar, si, ciertamente, a ascender.

Esto que vemos, pudiera ser una vulgar rueda de churros que el churrero inicia en el centro del caldero, con todo el aceite hirviendo y procede, con buen pulso y equilibrio, dando giros y creando tantas vueltas como demanda el cliente.

Esta rueda, así construida, no es cerrada sino abierta, permitiendo ampliarse y extenderse a conveniencia … lo permite porque es como rueda, pero sin serlo. Este peculiar caso es la espiral.

Y si a la espiral le provocáramos un estiramiento desde el centro, originaríamos un helicoide. Así podemos ver y entender ciertos modelos de la naturaleza …

Por este motivo, y por esta razón hoy os escribo queriéndoos transmitir este pensar… La misma naturaleza nos lo advierte y da, solo hemos de saber captar y guardar. 

Observa y recuerda, así pues …

    

Recuerda no es una “caracola”, es un signo y símbolo de lo concreto y de lo abstracto, de lo inmediato y de lo perenne, de lo manipulable y lo inabarcable … para que lo puedas comprender… Esta solución de crecimiento, cual escalera de caracol, mantiene toda su potencia en proyección de sus fuerzas para proporcionar la máxima resistencia. Es una solución presente primero en el mundo vegetal, en los cactus y los mismos pétalos de las flores; luego en el animal, moluscos, y en el mismo ordenamiento de las galaxias … permitiéndose extenderse y crecer sin descomponer sus ligamentos anteriores …

La caracola es un recuerdo, y deseo que cual amuleto, te proporciones “suerte”, en tu progresar en el conocer.

Feliz periodo vacacional en el solsticio de verano, del periplo de nuestro planeta Tierra alrededor de la estrella Sol.

21 de junio 2019